«Los muebles viejos y maltrechos, recuerdos perennes de las antiguas peregrinaciones huyendo de la miseria, comenzaban a desaparecer, dejando sitio libre a otros que la hacendosa Teresa adquiría en sus viajes a la ciudad. El dinero producto de la recolección invertíase en reparar las brechas abiertas en el ajuar de la barraca por los meses de espera».
La barraca
Vicente Blasco Ibáñez
Interior de una barraca
Huerta de Valencia
Barberá Masip
Bivaldi
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