miércoles, 14 de abril de 2021

Se estaba el día entero vigilando a los carpinteros

«Y las vecinas del barrio que comentaban tales noticias, al pasar por la acequia del Gas acercábanse a los tinglados de los calafates para contemplar con cierta envidia al Retor que, mascullando el cigarro, se estaba el día entero vigilando a los carpinteros que aserraban y cortaban maderos amarillos, frescos y jugosos, unos rectos y fuertes, otros encorvados y finos, para la nueva embarcación. 

La faena se hacía con calma. Nada de precipitaciones ni de errores; no había prisa. Lo único que deseaba Pascualo es que su barca fuese la mejor del Cabañal».

Flor de mayo

Vicente Blasco Ibáñez



Astillero en la playa del Cabañal

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario