«Se detuvo el carruaje frente a la tabernilla del puerto, y bajó Neleta. El Cubano no ocultó su asombro. ¿Y el abuelo…? La había dejado emprender sola el viaje de regreso con todo el cargamento de hilo, que llenaba la tartana. El viejo quería volver a casa por el Saler para hablar con cierta viuda que vendía a buen precio varios palangres. Ya llegaría al Palmar por la noche en cualquier barca de las que sacaban barro de los canales».
Cañas y barro
Vicente Blasco Ibáñez
Puerto de El Saler. Años 50
Fang Xu
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