«Arrós y tartana,
casaca a la moda...
¡Y rode la bola
a la valensiana!
Estas son, según el antiguo cantar, las aspiraciones del buen valenciano. Si al nacer se encuentra con el plato de arroz asegurado, con la tartanita que ha de llevarle al mar o a la vega alborotando el camino con el cascabeleo escandaloso de la jaca, y la casaca a la moda de que habla la canción, considera Valencia como «el mejor de los mundos posibles» y no pide más; si nace pobre, trabaja toda su juventud con la tenacidad e inteligencia de los pueblos mas laboriosos, y apenas conquista el arroz y la tartana para el resto de su vida, se da por satisfecho y entrega la herramienta con que fabricó su mezquina fortuna a los que vienen detrás: al hijo o al obrero de su confianza».
Alma valenciana
Vicente Blasco Ibáñez
La Alameda
VAHG
No hay comentarios:
Publicar un comentario